Eje ciclista Alcalá - mRío


No quería terminar el año sin hacer una reseña de este importante acontecimiento para los ciclistas de Madrid y, aunque me faltan un par de fotos, creo ya tengo suficiente documentación recopilada como para emitir una opinión al respecto.
Como el recorrido cambia constantemente de formato y gran parte de él  no se ha tocado más allá de pintar alguna señalización en la calzada, creo que lo más interesante es hacer una descripción de los verdaderos cambios, empezando por los que me parecen positivos, continuando con los negativos y terminar denunciando los puntos negros que tiene el trazado.
Positivo sin duda es el tramo en la calle Alcalá que va desde Cedaceros hasta Cibeles, un tramo de carril bici, lo que ciclistas, peatones y conductores identifican inequívocamente como carril bici, y que mide unos 400 mts. de longitud, el 14% aproximadamente del recorrido total del eje. Se trata de un carril de doble sentido que discurre detrás de las paradas de autobús, con espacio suficiente para que un ciclista pueda maniobrar sin problemas ante un imprevisto y mantenerse suficientemente alejado de los coches puesto que en ausencia de otros ciclistas siempre tenderá a circular por la zona central del carril.
La ubicación en la calle por el lateral izquierdo (de subida) es acertada puesto que así evita la entrada a la Gran Vía, una entrada con varios carriles y tráfico muy rápido cuando no parado.
Este carril bici es interesante por dos motivos, primero porque ya era hora de que Madrid tuviera un carril de estas características en el centro y segundo porque queda demostrado que es perfectamente viable, que si no se ha hecho hasta ahora no es porque no se pudiera, es que no se quería.....
No se quería y siguen sin querer porque lo bueno se acaba rápidamente y nos quedamos haciendo equilibrio mientras continúan. Por el lado de Cibeles desaparece carril y señalización y tenemos que cruzar para encontrar el límite de velocidad a 30 Kms/h. en una plaza donde absolutamente nadie lo respeta. El carril de doble sentido se ha transformado en un arcén de un solo sentido en el nuevo tramo, pero con dos cosas buenas (seguimos en la parte positiva): Hay una valla que impide maniobras inesperadas de los peatones y nos hemos colocado a la derecha de la calzada (y no en el centro como antes, con coches por la izda. y buses por la derecha si respetábamos el carril bus) algo importante para un ciclista en una calzada de subida.

Por el lado de Cedaceros nos ocurre algo parecido, el carril se transforma en un arcén de un solo sentido antes de cruzar al otro lado de Alcalá. Tanto el arcén como el paso es estrecho y no está pensado para un nº importante de ciclistas.
¿Por qué no se ha continuado con el mismo carril bici tanto por un lado como por el otro de la calle Alcalá?
La pregunta tiene difícil respuesta, más todavía cuando pasamos al otro lado de la calle en este tramo y vemos el espacio disponible que hay para peatones y las dos filas de aparcamiento infrautilizadas.
Al parecer son temas económicos los que han condicionado que no se haya hecho un carril bici de mayor longitud pero, viendo a continuación el resto del recorrido, me atrevo a decir que muy probablemente este tramo sea a medio plazo el más barato con diferencia de todo el recorrido... 
Estamos en Sol (pasamos de nuevo al otro lado) y cogemos el carril de la calle Mayor. Este carril circula en dirección contraria a los coches y autobuses y su principal problema es que, a pesar de ser de un solo sentido, no cabe por esta calle. De ahí que sea estrecho, incómodo, lento e inseguro y que ciclistas, peatones y conductores lo identifiquen inequívocamente como chapuza.

El primer problema que se plantea es que los peatones no esperan a los ciclistas en sentido contrario a los coches y cruzan confiadamente a pesar de que los semáforos digan lo contrario. 





El segundo problema es que a pesar de la densidad de peatones (es la misma que en Arenal, calle desestimada por el Ayuntamiento para meter un carril bici por este motivo) la señalización es insuficiente y no deja claro que los ciclistas puedan circular en ese sentido....


Entre otras cosas porque la que había está  desapareciendo apenas un mes después de inaugurarlo.



El siguiente problema son los autobuses, no caben para girar. En concreto en la esquina con Esparteros el bus gira invadiendo el espacio de los ciclistas y su conductor, al igual que los peatones, tiende a mirar hacia el lado de los coches porque no hay semáforo y debe cederles el paso.



Como no cabe, no le queda más remedio que invadir el espacio de los ciclistas cada vez que algún coche abre una puerta... y son muchas veces porque la mayoría de los coches son taxis. Hay que recordar que por aquí pasan varias líneas de la EMT (compadezco a sus conductores con este invento que les han puesto), el bus turístico de Madrid y los buses de turistas que llegan a los hoteles.


Luego vienen las motos. Ante el caos que se monta en esta calle no les queda otra que huir por donde pueden....Adivina por dónde...



Eso cuando no son otros los que huyen y te encuentras a la policía de frente a toda pastilla....









Y ya por último los coches. Como la Pta. del Sol no puede atravesarse en coche particular se ven obligados a abandonar la calle en alguno de los cruces anteriores invadiendo el espacio de los ciclistas y generalmente bloqueándolo puesto que tienen que ceder el paso a los muchos peatones que están cruzando.







A 10... Y no es broma, puede que con paciencia y buen hacer hayas superado todas las pruebas (al menos 6 pasos de cebra incluidos) y hayas llegado sin ayuda del Samur hasta aquí (estamos enfrente del Mercado de San Miguel), lo que es muy improbable es que en algún momento hayas superado los 10 Kms/h....   
A partir de aquí carril 30 hasta el río, la fórmula que se ha empleado para el resto del recorrido (Pta. Alcalá-O´Donnell, O´Donnell-Pta. Alcalá-Cibeles, Sol-Cra. S. Jerónimo-Cedaceros y río-calle Segovia-Mayor-Sol) y la fórmula que parece va a utilizar el Ayuntamiento en el futuro. 
No merece la pena añadir fotos de todo este recorrido porque no se modifica nada en esencia lo que había y prefiero opinar sobre esta fórmula en las conclusiones.

Sí quiero llamar la atención, sin embargo y para terminar, en el carril 30 de la calle Segovia y más concretamente en el giro de la Pza. de la Cruz Verde. Esta calle es una de las de mayor desnivel de Madrid, en concreto, y utilizando la herramienta Earth Tools (www.earthtools.org), me sale un desnivel de un 8 % en ese tramo, un desnivel donde a duras penas un ciclista habituado mantiene una velocidad de peatón y donde la inmensa mayoría de los ciclistas se ven obligados a bajarse de la bicicleta. Para mayor complicación, la calle soporta tres líneas de autobuses que literalmente no caben en algunos tramos. La maniobra que propone aquí el Ayuntamiento consiste en que el ciclista que lleva casi 500 mts. de subida al 8% se coloque a la izda. a una velocidad de 6 Kms/h. y se detenga entre autobuses a la espera de que el semáforo le permita girar a la izda. para meterse en la única   calle empedrada que queda en Madrid, la calle de la Villa, y donde el desnivel pasa a ser aún mayor.... 
Es evidente que la persona que ha tenido esta idea ha montado poco en bici y, si lo ha hecho, no lo ha hecho con remolque o con niños. Tampoco ha debido hacerlo de noche o lloviendo.
Igual que en el tramo de Mayor me permito hacer bromas, al fin y al cabo los ciclistas de Madrid ya están habituados a este tipo de chapuzas, aquí me parece que se rebasa una línea roja a nivel de irresponsabilidad por parte del Ayuntamiento.
Para comprender mejor la situación a la que se nos expone a los ciclistas he hecho unas fotografías desde el Viaducto de las diferentes situaciones que se producen constantemente en ese punto y donde se aprecia que no hay espacio para hacer ese giro si no es a costa de poner en peligro al ciclista que lo intenta.
En todo caso, si se empeñan en utilizar una calle que no vale para el tráfico ciclista, qué menos que eliminar las líneas de aparcamiento en ese tramo.... 












Conclusiones

El eje ciclista Pta. de Alcalá - Madrid Río que ha inaugurado recientemente el Ayuntamiento de Madrid es un recorrido de casi 7 Kms. (ida y vuelta) con tres tipos de vía que se reparten del siguiente modo:

- 70 % de carril 30.
- 16 % de carril bici de un solo sentido.
- 14 % de carril bici de doble sentido.
El hecho de que la mayor parte del recorrido se haya planteado a base de carril 30 define claramente la filosofía del proyecto: Conseguir el mayor impacto publicitario con la menor inversión posible. Y no me parecería mal si al menos se hubiera hecho adecuadamente. Pero no es el caso. 
Por un lado, el carril 30 funciona bien en zonas de tráfico pacificado previamente y no es el caso de Madrid. Ni el recorrido (zonas con desniveles enormes) ni las circunstancias (zonas donde jamás se respeta el límite) en Madrid son las adecuadas para que este tipo de intervención tenga éxito.
Los ciclistas de Madrid, por otro lado y salvo excepciones, no están por la labor de asumir la responsabilidad de pacificar el tráfico, una responsabilidad que corresponde al Ayuntamiento. Primero es tomar medidas eficaces para calmar el tráfico y después ya saldrán los ciclistas y no al revés como se pretende con este eje.
Por último, dentro de este apartado, señalar que los principales puntos negros  de todo el recorrido se encuentran, lógicamente, en este tipo de tramos: Calle  Segovia entera, calle de la Villa, cruce de Mayor con Bailén (un semáforo en dos tiempos con los ciclistas en medio de la calzada del que no tengo -todavía- foto ilustrativa), giro en Cibeles y giro en Pta. de Alcalá.
En cuanto a los tramos de carril bici de un solo sentido hay que diferenciar el de Alcalá y el de Mayor. El primero es un carril útil que cualquiera puede incluir en su recorrido para ir a trabajar porque es rápido y seguro. La única pega es que es breve, unos 350 mts. El de Mayor, sin embargo, es todo lo contrario y se podría incluir entre los principales puntos negros del recorrido si no fuera porque las velocidades, tanto de ciclistas como de los coches, aquí son ridículas, es un carril de juguete de los que estamos acostumbrados en Madrid.
Finalmente tenemos el tramo de carril bici de doble sentido, un tramo que me hace sentirme optimista. No hay más que copiar y pegar este tramo desde Pta. de Alcalá, a lo largo de toda la calle Alcalá, Sol por la derecha a la calle Arenal, pasar por delante del Palacio Real y bajar por Cuesta de San Vicente, tal y como propongo en mi mapa MCB, para obtener un recorrido más bonito, con menos problemas, más seguro, con menos contaminación, con un desnivel más progresivo y con más posibilidades de ampliación, es decir, un recorrido más eficaz, más barato a largo plazo y que sacaría much@s más ciclistas al centro de Madrid..... ¿o es que no es éso de lo que se trata?

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Ya tengo las fotos del cruce de Mayor con Bailén.
La secuencia es la siguiente:
El/la ciclista llega al cruce ejerciendo su derecho a circular por el centro del carril 30...


Quiere seguir recto pero al llegar al semáforo se percata de que el giro a la derecha está verde...




Una furgoneta con prisa viene pitando para que le dejen el carril libre...






El ciclista se mueve al carril de la izquierda con gesto de mosqueo...
(las fotos no son malas, es que no paran de girar coches y es la situación real en la que empieza a verse el ciclista)
El ciclista se queda con gesto humillado al comprender que tiene derechos, pero que duran lo justo hasta que los coches hacen prevalecer los suyos (un ciclista urbano circula de promedio a 20Kms./h y obliga a los coches en un carril 30 a ir a una velocidad inferior, con el típico conflicto en el que ambos tienen razón, pero en el que siempre pierde el ciclista)....
El semáforo se ha cerrado para girar, el ciclista se ha quedado en el medio, si arranca lento mal porque le van a pitar, si arranca rápido peor porque se encuentra de frente con los que giran a la izda....
Y lo más importante, si se produce un accidente, aparte de llevarse la peor parte, mucho ojo porque la compañía de seguros del que le atice puede alegar que la culpa es del ciclista por ubicarse donde no le correspondía.

Es lo que tiene caer en las trampas que la alcaldesa no electa de Madrid y su equipo de asesores le preparan a los ciclistas de nuestra ciudad.....

Air Quality

La Universidad de California en San Diego ha desarrollado el proyecto CitiSense“el único sistema de vigilancia de la calidad del aire capaz de suministrar los datos en tiempo real a teléfonos móviles y ordenadores personales en todo momento".
El sistema a día de hoy es caro, los sensores cuestan unos mil dólares, pero la información se transmite igualmente a teléfonos que no los llevan y el potencial del sistema es evidente. La idea es abaratar costes a base de incorporar los sensores como equipo de serie del teléfono en el futuro. Los niveles de ozono, óxido nitroso y monóxido de carbono se muestran en la pantalla del teléfono sobre con un código de colores de menor a mayor peligrosidad. “Estamos haciendo visible lo invisible”, dice William Griswold, experto en ciencias de la computación y líder del proyecto. 
Una mala noticia sin duda para el Ayuntamiento de Madrid, que lleva años haciendo precisamente todo lo contrario....

Dinamo

No ha hecho falta esperar mucho para comprobar nuestras teorías acerca de la mejora del comercio local en las zonas por donde pasan carriles bici. Madrid Río se ha convertido en  una zona comercialmente interesante y son muchas las personas que han apostado por abrir tiendas allí, a pesar de que en el resto de Madrid se siguen cerrando como consecuencia de esta crisis-estafa.
Aparte de bares, terrazas, alimentación, ropa deportiva, etc., las tiendas de bicis son, lógicamente, las que más se ven y las que más variedad de oferta proponen. De todas, hemos elegido Dinamo como ejemplo de negocio floreciente en la zona porque es la tienda que más se parece a la que nosotros pondríamos.
Por un lado, una oferta de bicis nuevas basada en marcas no tan conocidas pero que en realidad son segundas marcas de las famosas a precios más competitivos. Segundo, una apuesta clara por las bicis urbanas e híbridas, incluidas las de ayuda eléctrica. Y, tercero, un apartado de "bicis con historia" donde poder vender, comprar, reparar, restaurar y adaptar bicis viejas y antiguas.
Os deseamos desde aquí mucha suerte con el proyecto...

Solar Decathlon Europe 2012

Un año más tenemos por Madrid a los 20 equipos de 12 países que participan en la competición de casas solares. Este año se celebra en la Casa de Campo del 14 al 30 de septiembre y, echando un vistazo a su web, el panorama se presenta más que interesante. Por un lado, la participación de equipos inéditos en estas lides como Hungría, Rumanía, Egipto, Brasil o Portugal, aparte de los habituales como Alemania, Dinamarca, Francia, China, Japón e Italia y, buena noticia, 5 equipos españoles.
Por otro lado, una oferta variada de proyectos modulares y ampliables a base de módulos prefabricados que permiten un importante abaratamiento de costes, problema esencial de este tipo de casas hasta ahora.
Y, por último, una novedad que no vimos en ediciones anteriores, un proyecto de barrio, Canopea, del equipo Rhône-Alpes, que nos parece interesante ahora que Ikea ha anunciado que se va a dedicar a hacer barrios....
Las imágenes que hemos traído corresponden a los proyectos de la Universidad de Zaragoza y su Casa Pi, la Counter Entropy House de la Universidad de Aachen (Alemania) y la ekihouse de la Universidad del País Vasco.  

10 razones para un carril bici en Madrid

Para celebrar las 3.000 visitas en nuestro mapa MCB, hemos elaborado un decálogo de razones por las que una red básica de carriles bici mejoraría la movilidad y la calidad de vida en Madrid.


1. El carril aumenta exponencialmente el número de ciclistasLas razones son muchas, algunas de ellas expuestas a continuación. La realidad observable es que en Madrid, y tantas otras ciudades, donde hay carriles hay muchos ciclistas.    

2. El carril permite circular con más tranquilidad a niños, mayores, personas poco habituadas al tráfico y ciclistas con remolques y transportines. Por un lado el conductor se ve obligado a respetar las distancias  y por otro la densidad de ciclistas hace que sean más visibles y a la vez más respetados.

3. El carril es más seguro que la calzada, especialmente de noche y/o con lluvia
En Madrid, durante los meses de invierno, la mayoría de los desplazamientos para ir y volver de trabajar se hacen de noche y, aunque llueve relativamente poco, o quizá por eso, la ciudad se colapsa cuando llueve. El carril garantiza que la gente que se mueve en bici en verano no se vea obligada a guardarla en invierno.

4. En un carril se respira menos contaminación que en la calzada.
Cuanto más alejados de un foco contaminante, en este caso tubos de escape, mucho mejor para nuestros pulmones. Incluso siendo un carril integrado en la calzada, el circular paralelos y no detrás de los coches aumenta considerablemente la calidad de vida del ciclista.



5. Los carriles bici disminuyen la contaminación de las ciudades.
Como consecuencia de los puntos anteriores, cada vez más gente se pasa a la bici como medio de transporte habitual. Madrid, una ciudad que mantiene durante todo el invierno unos niveles de contaminación ilegales, debe tomar cartas en el asunto de manera urgente en este sentido.



6. Los carriles mejoran la salud pública de la ciudad.
Con más personas montando en bici se disminuyen las afecciones relacionadas con el sobrepeso, y cardiovasculares en general, mejorando la salud de los ciudadanos. Los carriles ahorran dinero al sistema de salud público.
7. Los carriles activan el comercio y la economía locales. Los carriles revitalizan el comercio allí por donde pasan puesto que el flujo de personas, tanto residentes como turistas y visitantes, es constante. Los carriles suponen una inversión rentable y con más futuro para el ayuntamiento que una línea de aparcamiento puesto que dan más puestos de trabajo y recaudan indirectamente más impuestos.




8. Los carriles revitalizan la actividad sociocultural de la ciudad. La posibilidad de moverse sin depender de horarios y tarifas del transporte público, un transporte caro e insuficiente para la mayoría de los jóvenes en Madrid, hace que el movimiento de la ciudad se intensifique y que la propuesta cultural se diversifique y mejore. Los carriles permiten ahorrar en transporte público.


9. Los carriles bici son una inversión barata, segura, rentable y sostenible.
De todas las inversiones en infraestructura de una ciudad, un carril bici es la que probablemente mejor se adapta a épocas de crisis. Una inversión relativamente barata con una enorme capacidad de transformación que afecta a diversos ámbitos de la ciudad. Si se hace de manera adecuada, ordenada según una planificación global y en carriles de calidad, ya ha sido probada en tantas ciudades que este tipo de inversión no plantea dudas ni incertidumbres de ningún tipo.
10. Los carriles mejoran la eficiencia energética y la imagen de una ciudad.  
Como consecuencia de todo lo anterior, la imagen de Madrid, una ciudad excesivamente conservadora y tradicional, hasta ahora sin apostar por la bicicleta como medio de transporte, se vería sustancialmente mejorada y con mayor capacidad de evolución. Con una red básica de carriles bici, Madrid recuperaría la esperanza de ser algún día una ciudad a nivel europeo y ofrecería una cara más amable a la hora de desplazarse por ella.